“EL DIARIO VIVIR …” POR FIN VIO LA LUZ

Escribir una novela no es fácil, yo me pase casi 30 años escribiendo una… y por fin la terminamos y presentamos el viernes 24 de marzo último, bajo un clima adverso, pero ni la lluvia impidió su alumbramiento en la rebelde ciudad blanca.

Una de las salas de la Biblioteca Regional “Mario Vargas Llosa” cobijo a los testigos del surgimiento de la tercera obra  que editamos con el título de: “El Diario Vivir de los hijos de la guayaba”, la periodista y docente universitaria Ana Guillén Pérez, al presentar la obra dijo: Realmente se trata de una obra muy divertida a pesar de los contenidos que trata, los cuales leí en un par de tardes y me dejo impresionada por la valentía de la autora al graficar en un escenario ficticio,  temas  tan reales.

Posteriormente, el historiador y autor de varias obras literarias e históricas, Hélard André Fuentes Pastor, al hacer un análisis de la obra, destacó que Nexmi Daza Arenas no sólo es una de las pocas  mujeres periodistas que publica una obra, sino que aborda temas referidos a los periodistas y habla sobre temas contro
versiales como la convivencia entre comunicadores, su vida bohemia y los interés económicos que mueven su accionar y peor aun cuando ostentan el poder. Asimismo, Fuentes, destacó la creatividad de la autora para describir personajes y narrar crónicas de vivencias con un lenguaje sencillo, ágil e irónico.

Así pues, los periodistas nos pasamos la vida escribiendo historias acerca de los demás, pero muy pocas veces, escribimos sobre lo que somos o hacemos, humanos con debilidades, aspiraciones, flaquezas y errores que criticamos con frecuencia a los otros, pero nunca a nosotros mismos.

Este libro intenta justamente hacer lo contrario, es decir, escribir sobre nosotros los periodistas, personajes que puede ser aquel, tu o yo o ninguno en particular; porque en todos lados hay buenos, regulares y malos periodistas, los que buscan la verdad y nada más que la verdad, los justicieros y también quienes sólo buscan el poder y el dinero.

Así pues, las historias interesantes y que constituyen noticia, no sólo están en las calles, sino también en las propias redacciones o quizás en el interior de las personas que se refleja en cada una de sus acciones.

Es que la vida, una ruleta en constante movimiento, nos ubica unas veces arriba y otras abajo, nos pone frente a distintas circunstancias para probar nuestra fortaleza, inteligencia y calidad humana. Porque no hay nada tan complicado como el ser humano, hombres y mujeres de carne y hueso, con características anatómicas similares, pero con ideas y personalidades tan distintas, que se revelan de manera insospechada en las diferentes circunstancias de la vida.

Aquí no pretendemos hacer un estudio psicológico ni mucho menos, pero con tono realista y a veces irónico realizamos relatos cortos para formar esta historia vivida en más de 30 años pero que es contada en menos de 300 páginas, utilizando algunos géneros periodísticos y literarios: como la crónica, el comentario y la descripción.

La pérdida de valores morales que sufre nuestra sociedad en estos tiempos también se evidencia en las narraciones. “Caras vemos, corazones no sabemos”, pero tras leer estas páginas, probablemente más de un comunicador se sentirá incómodo, pensando verse dibujado en alguno de los personajes que nuestra pluma traviesa pinta, pero no os preocupéis, porque como puedes ser tú, también puede ser cualquier otro, que habita aquí o acullá. Pues como en toda novela, lo verosímil puede utilizar personales y lugares ficticios para revelarse; o los cuentos pueden utilizar la fantasía para reflejar la realidad.

La novela que presentamos, tiene larga data, la empezamos a escribir hace casi 30 años, y cuando pensábamos que la historia concluía con una veintena de relatos, surgieron nuevos acontecimientos que nos instaron a seguir escribiendo una segunda parte, complementada con algunos comentarios que fueron publicados en un semanario de la localidad y que para esta obra fueron adaptados.

Nuevamente se avizoró un final, pero la tentación de seguir escribiendo fue más fuerte y logramos un tercer capítulo, que constituye el complemento de los dos anteriores con nuevos personajes y un escenario en donde el tema de moda, la corrupción, se grafica en varias situaciones.

Son pues relatos cortos para una lectura ágil, porque los tiempos actuales nos obligan a ser rápidos en todo, además a las nuevas generaciones, a las que también queremos llegar, los textos largos los espanta peor aun cuando no hay imágenes propiamente dichas, claro  la lectura se encargara de hacer fluir los escenarios y las personalidades de los actores.

Y no digo mas, porque espero que lo leas….

#periodistas