SERVIR AL ESTADO FUE SU MISION

REQUIEM PARA DORIS VELASQUEZ

Que injusta es la sociedad cuando estereotipa a los servidores del estado, como incapaces, ociosos y corruptos, por los errores de unos o de muchos en estos tiempos; sin pensar que a pesar de todo siempre hay alguien que trabaja con honestidad y verdadera entrega, perlas y diamantes escondidos, pocos quizás, pero que gracias a ellos caminan y sobreviven las instituciones.

Hoy toca despedir a nuestra compañera de trabajo y amiga, Doris Julia Velásquez Segovia, una verdadera servidora pública, quien laboró mas de 30 años en la Municipalidad Distrital Jacobo Hunter, empezó como secretaria y gracias a su entrega, dedicación y esmero llegó a ser Sub Gerente de Servicios Comunales. Ella trabajo de lunes a domingo y en muchas ocasiones: mañana, tarde y noche para poder cumplir con las diferentes actividades que desarrollaba la Comuna de Hunter, en esos tiempos en que la Municipalidad contaba con la cuarta parte de trabajadores de los que hoy tiene. Doris no sólo dirigía y disponía el trabajo sino que se involucraba en él como debe hacerlo siempre un o una verdadera jefa.

Fue la “hormiguita”, que silenciosamente iba y venia para cumplir cada tarea encomendada, por las diferentes gestiones ediles, siempre atenta y responsable porque entendía que su obligación era servir a su distrito. Siempre respetó y cuido los bienes del Estado, ella era la primera que tenia todo listo y en su lugar para los inventarios y transferencias; pues desde siempre desarrollaba su trabajo con mucho orden y prontitud.

Recuerdo que cuando estuvo en el Departamento de Fiscalización de Administración Tributaria, aprendió rápidamente los procedimientos y los desarrollaba a cabalidad; tenia todos los documentos correctamente archivados, si necesitábamos alguno, al instante lo ubicaba y proporcionaba. Nunca dejaba para mañana lo que podía hacer hoy.

Como quisiéramos, que Doris viviera eternamente en la Municipalidad de Jacobo Hunter para que nos enseñe a tener todo en su lugar y que también existieran cientos de Doris en cada dependencia del Estado para corregir la imagen equivocada de la burocracia en nuestro país.

Sigamos el ejemplo de Doris sólo así no la olvidaremos...