DESPUES DE 194 AÑOS DE SU MUERTE, MELGAR AUN NO DESCANSA EN PAZ

El Parque Melgar en honor al vate arequipeño se encuentra descuidado, el monumento es agredido con grafitis obscenos y el pegado de afiches. La Municipalidad Provincial de Arequipa debería prestarle más atención.

Este jueves 12 de marzo se cumplen 194 años del fusilamiento de nuestro máximo representante de las letras y precursor de la Independencia Americana, Mariano Lorenzo Melgar y Valdivieso, es decir, falta sólo 6 años para el Bicentenario de su inmolación y aún sus restos no son habidos ni pueden descansar en paz y mucho menos recibir el homenaje que debemos los arequipeños a este gran hombre que entregó lo más valioso, su vida, por nuestra libertad.
Hablar sobre la vida de Melgar sería extenso, pues a pesar de su corta existencia (10-08-1790 al 12-03-1815), es uno de la figuras más destacables en la historia de Arequipa, pues desde muy niño demostró gran inteligencia y sabiduría, sobre la cual se ha escrito mucho; pero en ésta ocasión próxima a un aniversario de su partida queremos incidir en aquello que aún está pendiente.
Según se indica en la obra “El Poeta Mártir Mariano Melgar” de Gustavo, Jorge y Xavier Bacacorzo, el poeta, político y soldado Mariano Melgar fue acribillado con balas calibre 48 el 12 de marzo de 1815 por orden del sanguinario oficial español Juan Ramírez. Por otra parte, existen versiones de que sus restos habrian sido exhibidos sobre el puente del río Llalli, camino a Umachiri, para que sirva de desengaño y de escarmiento para los traidores a la Corona Española. Asimismo, se señala que sus despojos fueron guardados en la cercana capilla de Macarimayo y de allí luego pasaron a la iglesia de Ayaviri.
Sobre lo ocurrido el 12 de marzo de 1815, el periodista Manuel Rodríguez Velásquez (MAROVE), que investigó sobre el paradero de los restos de Melgar, durante muchos años cuando laboró en los diarios Noticias (ya desaparecido) y El Pueblo de nuestra Ciudad, nos indica que fueron entre 7 y 8 personas a las que mando fusilar el brigadier Juan Ramírez Orosco, entre los que había incluso un español y un cacique; lamentablemente el pueblo de Arequipa ante tales hechos no reaccionó, al parecer por temor, no en vano nos dieron el título de “la muy noble y leal Ciudad Blanca”.
Recién, según MAROVE, después de 18 años, en l833, el Prefecto de Arequipa de aquel entonces ordena a uno de sus subordinados traer los restos de Melgar, pero al parecer el comisionado no encontró nada en Umachiri y sólo por cumplir recogió algunas osamentas que encontró en el lugar; las que fueron primero depositadas en la capilla de Paucarpata y luego en la Catedral de Arequipa (en aquellos años los entierros se hacían en los templos).
El 16 de setiembre de ese mismo año, se inaugura el Cementerio General de La Apacheta, con el ingresó de los supuestos restos de Mariano Melgar, los que fueron portados en un caja metálica curiosamente por Manuel Amat, esposo de María Santos Corrales, la “Silvia” del poeta; el Deán Juan Gualberto Valdivia pronuncia un emotivo discurso y don Manuel Gregorio de Rivero y Ustáruiz, sargento Mayor agradece a nombre del Ejército por la recuperación de las osamentas del vate mistiano, según publicó en aquella época el diario La Bolsa, sin precisar el lugar exacto del entierro.
Pero las penurias para el mártir de Umachiri no acaban; pues erróneamente, en 1891 se conmemora el I Centenario del Nacimiento de Melgar, se coloca un busto en la Plaza de Armas y desde allí se pasea su retrato hasta el que fue su domicilio en la calle Melgar, algunos de los asistentes sugieren que el lugar se convierta en museo. Entonces no se realizó romería alguna al Cementerio La Apacheta. Años después el historiador Alberto Ballón Landa descubre que la verdadera fecha del nacimiento de Mariano Melgar fue el 10 de agosto de 1790.
Como el busto construido en homenaje a Melgar, era pequeño y no satisfacía a los arequipeños, fue trasladado primero a la Plaza Bolognesi (hoy Parque Duhamel) y luego al distrito de Ayaviri (Melgar-Puno). Pues se decidió mandar hacer una efigie de mayor tamaño, que finalmente fue colocada en 1930 en el parque que lleva su nombre entre la calle Tacna y Arica y avenida Parra, figura que tampoco quedó a satisfacción de los arequipeños por no graficar en su verdadera magnitud al primer arequipeño que ofrendó su vida por nuestra Independencia, expresa el periodista Manuel Rodríguez.
Anota también que en 1950, el Rotary Club Arequipa se preocupó por ubicar los restos de Melgar encomendando a don Eduardo Cornejo Bouroncle tal tarea quien con el apoyo Rodolfo A. Gómez, revisan documentos sobre la fundación del panteón, pero no encontraron datos sobre la ubicación exacta de la caja metálica con los supuestos restos del poeta. Con ayuda del panteonero, hallaron varias cajas con huesos anónimos que reposaban debajo de la antigua capilla destruida por el terremoto, entre ellas una con los restos de Silvia que fueron colocados en uno de los pabellones ubicados al ingreso del Cementerio; y otra de metal que fue registrada en la oficina del Cementerio como ataúd de Melgar, éste depósito fue rechazado por Francisco Mostajo, quien dijo que las osamentas contenidas eran de variada cronología y pertenecían a personas femeninas y masculinas, por tanto no podían ser del vate arequipeño.
Para despejar dudas, en 1965, la Inspectoría de Cultura de la Municipalidad Provincial de Arequipa y la Corte Superior de Justicia proponen la conformación de una comisión técnica y científica, la cual fue integrada por los historiadores: Guillermo Zegarra Meneses y Marcial Barriga Velarde; el antropólogo Augusto Mazeira; el médico legista Edmundo Muñoz Llerena; el experto en balística Alfredo Sánchez Tasara; y Eduardo Ugarte y Ugarte, quienes el 23 de julio de 1965, emiten el siguiente informe:
1. Que el lugar donde se encontraron los restos que se atribuyen a Melgar en 1950, no coinciden con aquel en que se exhumaron en 1833.
2. Que la actual caja metálica tampoco coincide en sus características con la urna en que fueron depositados los restos de Melgar.
3. Que los restos que contienen dicha caja pertenecen indudablemente a varias personas de distinto sexo y edad.
4. Que el cráneo que se encuentra en dicha caja no coincide tampoco con la mandíbula, siendo ésta de una persona mucho mayor.
5. Que el cráneo presenta características femeninas.
6. Que el cráneo presenta un orificio de bala, deformado por la acción del tiempo, causado por un proyectil de calibre no menor de treintidos ni mayor de treintiocho (dictamen PIP) y que las balas que se utilizaban entonces eran de calibre 48 (dictamen histórico).
7. Todas estas comprobaciones, cuya explicación detallada se encuentra en los documentos anejos a este dictamen, han llevado a la Comisión al convencimiento que los restos que fueron hallados en 1950 por don Eduardo Cornejo Bouroncle y atribuidos por él a Mariano Melgar, no corresponden a los de dicho poeta y prócer. (*)
Los resultados de este informe fueron ocultados por las autoridades de aquel entonces, pues demostraban que Arequipa había sido objeto de una farsa histórica. Pero como nada permanece oculto la acuciosidad periodística hizo que se conocieran. Manuel Rodríguez Velásquez asegura que poco antes que muriera el Antropólogo Augusto Mazeira, este le permitió leer el citado informe. En tanto, que tras lo ocurrido Eduardo Cornejo Bouroncle y su familia se fueron a radicar a Lima en forma definitiva.
Este tema durante las décadas pasadas fue tocado varias veces, y a pesar del tiempo transcurrido y las limitaciones existentes, los arequipeños seguimos en deuda con Melgar y no está de más que investigadores e historiadores actuales, con el uso de los adelantos de la ciencia, busquen en el lugar donde fueron fusiladas varias personas el 12 de marzo de 1815 para determinar cuál fue el destino final de sus restos. Lamentablemente, Melgar no tuvo descendencia que podría demostrarnos mediante una prueba de ADN si las osamentas a encontrarse pertenecen a su genética, aunque existen versionesde que habria dejado un (a) descendiente en Majes.
Además la Sociedad de Beneficencia de Arequipa no guarda ningún resto atribuible a Melgar que pudiera someterse a estudio, ni en el osario ni en ninguna parte del Cementerio General de la Apacheta, según afirmaciones de las diferentes administraciones de dicha entidad.
Actualmente, sólo está reservada un área de 16 m2, en el frontis del Cementerio General de La Apacheta, cedida por Resolución Nº 026-2006 del 10-03-2006 del Directorio de la SBA al Instituto Melgariano, para que allí se construya un mausoleo-cripta a la memoria del Poeta Héroe Arequipeño Don Mariano Melgar y Valdivieso, proyecto que al parecer aún no se concreta por la falta de recursos económicos.
De realizarse esta construcción lo más conveniente sería colocar allí: la biografía, los versos de Melgar y su figura en óleo y bronce; más depositar osamenta alguna podría ser irresponsable. Salvo que algún día se encuentra algunos de sus restos debidamente comprobados. Mientras tanto esta historia aún no termina.




Esta es el área designada para la construcción de un mausoleo cripta a la memoria del poeta y héroe arequipeño Mariano Melgar y Valdivieso.

Comentarios

Lia ha dicho que…
Muy bueno este post que habla sobre Melgar, bueno por lo visto hay duda sobre sus restos pero mi pregunta es y ¿sobre sus obras? hay certeza que las obras atribuídas a él son relamente suyas? ¿hay pruebas fiables sobre eso? ; pertenezco a un grupo de comics y estamos haciendo investigaciones sobre Melgar para hacer una historieta sobre él, ¿hay algunos datos fiables que nos pudiera proporcionar? estaríamos muy agradecidas
:)
lucero azul ha dicho que…
Definitivamente los arequipeños tenemos una deuda con Mariano Melgar. Es triste no saber donde descansan sus restos, o que la casa donde nació tenga una deslucida placa de marmol, porque la de bronce fue robada, o que no se respete su monumento en el Parque Melgar. Pero más triste es que las nuevas generaciones están empezando a olvidarlo, y talvez sepan su nombre, pero muy poco de sus obras. Debería trabajarse en un proyecto para la creación de un museo donde se encuentre por ejemplo los cuadernos que escribió en vida, o difundir los yaravies que escribió y compuso. Sería lo minimo que podriamos hacer por el máximo símbolo de Arequipa.
JAIME RAMIREZ ha dicho que…
EL GENERAL ESPAÑOL JUAN RAMIREZ DE OROSCO, NUNCA FUE SANGUINARIO, TUBO LA CAPACIDAD DE ORGANIZAR MUCHAS AUDIENCIAS A NIVEL DE SU8D AMERICA DESDE ARGENTINA HASTA ECUADOR PASANDO POR EL PERU, LA GRAN EXPERIENCIA QUE TENIA FUE SU MAS GRANDE LEGADO.
ESCRIBE SU BISNIETO JAIME RAMIREZ

Entradas populares de este blog

“MENELIK” EL GLADIADOR INVENCIBLE

¿DE QUE COLOR ES NUESTRA BANDERA?