CASTILLO: DEMAGOGO O SOÑADOR
Soñar no es malo, pero trazarse metas con los pies en la
tierra, es siempre mejor, pero al parecer esto no va con el profesor Pedro
Castillo Terrones, quien este 28 de julio asumió la Presidencia de nuestro
Perú haciendo una serie de anuncios
populistas y/o demagógicos, que si bien son el anhelo de gran parte de los
peruanos, pero son difíciles de lograr e
implican una lluvia de millones para varios sectores.
En ese sentido, Castillo dijo que el sector salud será
prioritario dada la crisis generada por la pandemia, por tanto mejorara los centros
de salud y, al término de su gobierno
entregará hospitales especializados en cada región; además prometió generará un millón de empleos temporales,para
lo cual el estado otorgará 3 mil millones de soles a los gobiernos locales;
dará 700 soles a las familias vulnerables, también destinará mil millones para pagar la deuda social del magisterio; se destinaran 500 millones de soles para
reactivar el turismo y comercio local; y destinará pensiones universales o
iguales para todos peruanos. Pero, ¿todo esto será posible sólo con la
recaudación fiscal o se tendrá que recurrir al endeudamiento externo?, Castillo
no lo precisó.
Como era de esperarse, el líder de Perú Libre, declaró en
estado de emergencia el sector Educación
para recuperar los aprendizajes, según
dijo; para ello se otorgará un mayor presupuesto (no dijo en que porcentaje) a fin de fortalecer a la educación inicial, básica y superior; creara viviendas
para los maestros en las zonas rurales y se revalorizará la carrera
magisterial; se garantizará la conectividad a Internet, se mejorará la
alimentación de todos los escolares,
hasta de secundaria, con productos nativos de sus zonas; se impulsará la
educación técnica desde el tercer año de secundaria y el ingreso libre a las
universidades.
El flamante
mandatario, también dio un mensaje tranquilizador, sobretodo para el sector empresarial y a los contrarios
a su elección; pues al referirse a la reactivación económica, aseguro que
respetara la propiedad privada y que no
aplicara ningún tipo de estatización. Sin embargo, indicó que no se permitirá
que las grandes empresas sigan evadiendo al fisco y en el caso de los proyectos
mineros y agrícolas, estos deben dinamizar efectivamente la economía local,
regional y nacional, mejorando el nivel de empleo, nada más lógico, pero del
dicho al hecho…
Al parecer son buenas las intenciones que tiene este nuevo
gobierno, pero el camino por recorrer es bastante espinoso, si se tiene en
cuenta la burocracia estatal, que al parecer desconoce Pedro Castillo,
incluidas las diferencias entre los peruanos cuya multiculturidad de la que el mismo habla y que fomentara
desde el Ministerio de las Culturas, complicaran la concretización de tantas
reformas, para mejorar la salud, educación, la seguridad ciudadana y el
servicio militar de los que ni estudian ni trabajan. Pues se necesitaran de
normas cuyo debate estará a cargo del Congreso de la República, con el cual ya
tiene diferencias tras asumir el cargo y haber desairado al saliente Presidente
Francisco Sagasti al no dejar que entregue la banda Presidencial.
En el plano de las comunicaciones, solo se refirió a la
regulación de la publicidad del estado, indicando que el gasto de difusión se
dirigirá ahora a los medios de
provincias y a las redes sociales para evitar las presiones de los grupos
monopólicos hacia el gobierno; empero no dijo nada de la libertad de expresión,
que es un tema de preocupación de las mayorías.
Asimismo consideramos un craso error, el no gobernar desde
Palacio, recluirse en otro edificio y ceder este imponte monumento
arquitectónico al Ministerio de las Culturas, no sólo podría ocasionar su deterioro, sino hasta
un mal uso del mismo.
En cuanto al cambio de Constitución aseveró que estará
sujeta a las normas y a lo que el pueblo decida, algo que puede
tranquilizar a los defensores de la actual Carta Magna, pues nada garantiza que
el proyecto de reforma constitucional que se presentará al Congreso sea
aprobado y que en el referéndum la
población vote a favor.
El nuevo Presidente peruano tendrá que rodearse de un
gabinete, asesores y funcionarios que realmente le ayuden a concretar sus
sueños y a vencer las trabas que se le presentaran en el camino, porque
gobernar un país no es nada fácil y el
camino por la administración pública es lento e intrincado.
# Pedro Castillo
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