EL GAS, ¿CUANDO LLEGARÁ?
En este mes de setiembre, según afirmaciones del Presidente de la Región Arequipa, Juan Manuel Guillén Benavides, debe definirse la concesión de la Construcción del Gaseoducto para la Macro Región Sur o explotación de Camisea 3, que en un plazo aproximado de 4 años deberá llevar gas natural hasta nuestros hogares, pero al paso que van las cosas dudamos que esto se cumpla.
Los beneficios que nos traerá el gas natural son muchos y el principal será que nos permitirá disponer de un ambiente más saludable con menos contaminación; pero para esto tendremos que cerrar filas a fin de evitar su exportación a otros países.
Hace unas semanas, en el Seminario “El Gasoducto Macro Regional del Sur” mucho se habló sobre la utilidad del gas natural y a pesar de que el Vice Ministro de Energía, Pedro Gamio Aíta, afirmó que no se venderá el gas a Chile, el temor persiste, porque para nadie es un secreto la crisis energética por la que atraviesan el vecino del sur y su preocupación por construir plantas receptoras de gas.
Asimismo causó preocupación las afirmaciones hechas por los funcionarios de gobierno y de Petróleos del Perú, en torno a que el Perú tienen que cumplir de todas maneras el compromiso suscrito con México y todo el gas que se extraerá del Lote 56 se irá a dicho país e incluso parte del Lote 88, que está destinado para atender la demanda interna.
Los representantes del gobierno afirman que esto no debe preocuparnos pues el gas restante será suficiente para atender la demanda nacional que todavía es muy poca; ya que actualmente en el Perú más se consume petróleo (52%) y si dirigimos la mirada al sur el consumo de gas todavía es mínimo, en Arequipa sólo su uso es de 63,7 kilogramos por habitante al año y en el Cusco apenas llega a 5,2 kg /hab.
¿Pero cómo vamos a utilizar algo en gran escala que todavía no tenemos? En Lima antes que llegará el gas natural ocurría lo mismo pero una vez que se empezó a distribuir a través de los gaseo centros y redes domiciliarias, el consumo de este combustible creció tanto que hoy la demanda es mayor que la oferta.
El ingeniero Percy Castillo Neira, Director del Proyecto de Investigación “Energía en el Perú”, afirma que las reservas actuales del gas natural a lo mucho alcanzarán para 20 años más y por tanto los peruanos no podemos permitir que se exporte ni una molécula más. Si el Perú quiere vender algo deberá hacerlo a través de la industria petroquímica, es decir, con productos terminados.
En esto nosotros debemos ser inflexibles porque necesitamos el gas natural que debe llegar vía virtual primero desde la planta de Pisco para abastecer a los nuevos vehículos que renovarán el servicio de transporte urbano a partir del próximo año, a fin de tener un aire más respirable en Arequipa. De esto no tienen escapatoria los empresarios del transporte, porque el pago de las nuevas unidades estará más que garantizado y ni siquiera tendrán que incrementar el precio de los pasajes.
El Ing. Carlos Paredes Salazar, Director del Programa de Conversión Financiada a Gas Natural de COFIDE, explicó que los nuevos vehículos a gas cuentan con un dispositivo electrónico que registra cada compra de combustible y al efectuarse el pago, el propietario del vehículo abonará el precio del gas más un porcentaje de la deuda contraída por la compra del bus o taxi, es decir, que ni siquiera deberá ir todos los meses al banco para amortizar su crédito. Y considerando que el gas natural cuesta menos que el petróleo y la gasolina, al transportista todavía le quedará una ganancia mayor a la actual, por tanto no tendrá necesidad de incrementar sus tarifas.
Por tanto la renovación de nuestro Parque Automotor debe hacerse si o si y la Municipalidad Provincial de Arequipa y Policía Nacional, deberán demostrar su autoridad e impedir que a partir del 2009 sigan circulando unidades contaminantes. Pero también deberán dar el ejemplo retirando todos los vehículos de su propiedad que actualmente son cafeteras rodantes. Sino con qué cara se exigirá a otros el cumplimiento de la ley.
Los beneficios que nos traerá el gas natural son muchos y el principal será que nos permitirá disponer de un ambiente más saludable con menos contaminación; pero para esto tendremos que cerrar filas a fin de evitar su exportación a otros países.
Hace unas semanas, en el Seminario “El Gasoducto Macro Regional del Sur” mucho se habló sobre la utilidad del gas natural y a pesar de que el Vice Ministro de Energía, Pedro Gamio Aíta, afirmó que no se venderá el gas a Chile, el temor persiste, porque para nadie es un secreto la crisis energética por la que atraviesan el vecino del sur y su preocupación por construir plantas receptoras de gas.
Asimismo causó preocupación las afirmaciones hechas por los funcionarios de gobierno y de Petróleos del Perú, en torno a que el Perú tienen que cumplir de todas maneras el compromiso suscrito con México y todo el gas que se extraerá del Lote 56 se irá a dicho país e incluso parte del Lote 88, que está destinado para atender la demanda interna.
Los representantes del gobierno afirman que esto no debe preocuparnos pues el gas restante será suficiente para atender la demanda nacional que todavía es muy poca; ya que actualmente en el Perú más se consume petróleo (52%) y si dirigimos la mirada al sur el consumo de gas todavía es mínimo, en Arequipa sólo su uso es de 63,7 kilogramos por habitante al año y en el Cusco apenas llega a 5,2 kg /hab.
¿Pero cómo vamos a utilizar algo en gran escala que todavía no tenemos? En Lima antes que llegará el gas natural ocurría lo mismo pero una vez que se empezó a distribuir a través de los gaseo centros y redes domiciliarias, el consumo de este combustible creció tanto que hoy la demanda es mayor que la oferta.
El ingeniero Percy Castillo Neira, Director del Proyecto de Investigación “Energía en el Perú”, afirma que las reservas actuales del gas natural a lo mucho alcanzarán para 20 años más y por tanto los peruanos no podemos permitir que se exporte ni una molécula más. Si el Perú quiere vender algo deberá hacerlo a través de la industria petroquímica, es decir, con productos terminados.
En esto nosotros debemos ser inflexibles porque necesitamos el gas natural que debe llegar vía virtual primero desde la planta de Pisco para abastecer a los nuevos vehículos que renovarán el servicio de transporte urbano a partir del próximo año, a fin de tener un aire más respirable en Arequipa. De esto no tienen escapatoria los empresarios del transporte, porque el pago de las nuevas unidades estará más que garantizado y ni siquiera tendrán que incrementar el precio de los pasajes.
El Ing. Carlos Paredes Salazar, Director del Programa de Conversión Financiada a Gas Natural de COFIDE, explicó que los nuevos vehículos a gas cuentan con un dispositivo electrónico que registra cada compra de combustible y al efectuarse el pago, el propietario del vehículo abonará el precio del gas más un porcentaje de la deuda contraída por la compra del bus o taxi, es decir, que ni siquiera deberá ir todos los meses al banco para amortizar su crédito. Y considerando que el gas natural cuesta menos que el petróleo y la gasolina, al transportista todavía le quedará una ganancia mayor a la actual, por tanto no tendrá necesidad de incrementar sus tarifas.
Por tanto la renovación de nuestro Parque Automotor debe hacerse si o si y la Municipalidad Provincial de Arequipa y Policía Nacional, deberán demostrar su autoridad e impedir que a partir del 2009 sigan circulando unidades contaminantes. Pero también deberán dar el ejemplo retirando todos los vehículos de su propiedad que actualmente son cafeteras rodantes. Sino con qué cara se exigirá a otros el cumplimiento de la ley.
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