ESCENIFICACIONES Y EL SANTO SEPULCROEn la mañana del Viernes Santo, en varios distritos de Arequipa grupos parroquiales escenifican la Pasión y Muerte de Jesucristo, una de las más tradicionales es la de Paucarpata. a donde acuden miles de espectadores. Asimismo, al mediodía en el Templo de Santo Domingo, la Hermandad de Caballeros del Santo Sepulcro, realiza el Acto de Crucifixión, luego los sacerdotes interpretan las 7 Palabras que pronunció Cristo en la cruz; y por la tarde con la misma devoción se cumple la ceremonia de Descendimiento del Señor para ser colocado en el Santo Sepulcro. La imagen usada es articulada y se dice que fue hecha por ángeles, pues según se cuenta, hace 400 años aproximadamente se presentaron en el convento dominico dos escultores desconocidos que hicieron la bella imagen sin cobrar nada y menos probar alimento.
Mención especial merece la Procesión del Santo Sepulcro que se realiza en la noche del Viernes Santo, luego de la Liturgia de la Palabra y Adoración de la Cruz en la Catedral. Esta manifestación de fe está a cargo de La Hermandad del Señor del Santo Sepulcro del Templo de Santo Domingo, una de las más antiguas de Arequipa, a la que pertenecieron distinguidos arequipeños y héroes como Francisco Bolognesi, actualmente es integrada por varones desde los 7 años, que visten terno negro o smoking y llevan un collarín verde.
El cortejo sacro se realiza en completo silencio, los letreros luminosos se apagan, los files visten luto y llevan velas verdes; sólo se escucha las notas del Miserere interpretado por un pequeño grupo de músicos, el Cristo Yacente es seguido por María con el corazón atravesado por 7 espadas; antes van las andas de la corona de espinas con 2 angelitos, la Cruz con el Sudario, el cuadro del Divino Rostro, San Juan y María Magdalena llorosa y de luto. Los religiosos dominicos portan el Palio cubierto con una tela negra, mientras que el superior del templo, porta el “Lignum Crusis”, custodia similar a la del Santísimo pero en el cual no se lleva una hostia sino las reliquias auténticas del Calvario (una astilla de la cruz en que fue clavado Cristo, tierras del Calvario y del Huerto de los Olivos), que incluso tienen el sello de lacre del Vaticano.
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